
Hay telas bonitas, telas normales, telas feas y telas que te entran por los ojos y hasta que no haces algo con ellas no puedes dejar de rascarte la cabeza por el estrés metal que te produce. Les pasa a todos ¿¿¿verdad???? Díganme que sí como a los locos.
Había una vez una tela mostaza Oooooohhhh que bonita. Bueno sigo: había una tela de color mostaza a lunares blancos. Cada vez que alguien dice que no le gustan las telas de lunaritos muere un pajarito. Bueno, sigo que me lio mogolloni: había una tela mostaza con lunaritos blancos (muy folclórica y discreta ella) que me llamaba y me decía cóseme. Y yo la cosí. Yo cada vez que oigo voces en mi cabeza les hago caso por si acaso.
Y este es el resultado. Un chaleco de niña no discreto y calentito.
De este patrón he sacado este chaleco. Yo lo definiría como countrychic con un toque bohemio. También lo puedo definir como chaleco de lunares pero para qué vamos a estar parcos en palabras ¿pa´qué? Si eso no sirve pa´ná. Vamos a darle glam a la cosa hombre.
Las mangas no las cosí como me decía en el tutorial original porque yo ahí patino y he entrado dos veces en barrena. Las cosí por este tutoríal y me ha resuelto muy, muy bien. Me gusta más el resultado porque a mí me es más fácil. Odio coser a mano pero es lo que hay.
Inspiración
La inspiración divina me ha venido por aquí, vi esto en pinterest y me chiflé toda. Ya bajo el influjo lunanero me he hecho este otro chaleco.
Detalles
Botón precioso de madera.
[…] Es perfecto para entretiempo. Tiene una única abotonadura. Con un botón que me chifla y ya usé aquí (una de mis costuras […]