Kiki ha aparecido. STOP
¿sana y salva? Todavía está por ver. STOP
En la puerta de la cocina. STOP
Me ha mirado con cara de: ¡oh? Y tu que haces por aquí? ¿Nos tomamos un cafetito?. STOP
He comenzado a gritar y he llamado a los niños. STOP
La he puesto en su piscina pero no quiere comer. STOP
He llamado a toda la familia y todos estamos de subidón. STOP
18 días después, cuando ya habíamos perdido toda esperanza aparece en la puerta de la cocina, súper sequita. Me asusté porque no le veía las patitas delanteras y pensé que se las habían comido los lagartos pero no. La puse en el agua y comenzó a nadar tan contenta. Me preocupa que no haya comido pero que alegría más grande me ha dado verla.
Cuanto me alegro!!! Espero que se recupere del todo pronto
Gracias Dácil!!!! Vamos a ver cómo progresa
Que bueno…se iria de aventura, se le acabaron las reservas y no tuvo mas remedio que volver a por su plato caliente de cada dia. Me alegro que apareciera. Un beso
Hay Ana. Estamos que no lo creemos. La casa llena de cajas de mudanz y después de 18 días aparece ella fresca como una lechuga. Menudo morro la tía 😉
Jajajajaja ¡ya te dije que son unas golfas! Y eso de que no quiera comer, JUAS! Ya no se haya comido uno de esos lagartos, que menudas son jajajajaja
Me alegro mucho de que haya aparecido, ahora a vigilarla, que ya te digo yo que en cuanto te despistes se fuga otra vez.
Besoss
Hay Vanesa va a resultar que en vez de uan apocada tortuga tengo a una tremenda pendona. Ver para creer, hija. Ver para creer. y yo toda preocupada porque no había comido… menos mal que ya tenía tu experiencia ;). Besiños